Juan de Saavedra, marino español del siglo XVI, llegando por primera vez a estas tierras las nombra Valparaíso en honor a su pueblo natal (oficialmente la ciudad nunca ha sido fundada).
Valparaíso a través del tiempo crece en la memoria de los hombres, le recuerdan como pequeña aldea, puerto del Reino de Chile, luego de la independencia madura y crece para ser el puerto principal del Pácifico Sur, vive una época cosmopolita plena de esplendor, elegancia y bonanza, distinción que se esfuma al iniciar actividades el canal de Panamá
.
Entonces durante décadas la pobreza se apodera de la ciudad que se detiene en el tiempo como una postal que se desmorona lenta.
Así un poco fuera de la historia y así bastante fuera de las rutas de las modas, la ciudad muy en calma y sin saberlo, cultiva un nuevo atractivo para los ojos del mundo. En sus cerros y callejones sobreviven a la rápida y fugaz modernidad: maneras de vivir y de andar, arquitecturas e identidades culturales, cada vez más escasas y valiosas, para quienes buscan y valoran las herencias de los antepasados del mundo.
Ahora último la ciudad vuelve a ser reconocida. El año 2003 UNESCO le señala como “Patrimonio Cultural de la Humanidad”, es la “Capital Cultural de Chile” y en el 2010 sede del “FORUM Universal de las Culturas”.
Valparaíso está en América Latina al alero de la Cruz del Sur.
Sus coordenadas son:
longitud 71º 38’ Oeste
paralelo 33º 01’ Sur
Está a 110 Km., por la Ruta 68, del Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benítez.
Está a 115 Km., por la misma Ruta 68, de Santiago la capital de Chile.
Está a 210 Km. por la Ruta 60, de la frontera con nuestros vecinos de la República Argentina.
La ciudad te espera con sus miradores, sus ascensores, sus museos, su poesía, sus artistas, sus murales, sus callejones llenos de historia, sus cerros de anfiteatro frente al mar, sus trasnoches de bohemia porteña, sus universidades, su chorrillana, su música, su aire puro, sus mariscales, sus noches claras de cerros estrellados. Y por supuesto con sus habitantes: los locales, los de siempre, y los del mundo, esos que se enamoran y se quedan.
Ven, te esperamos en el colorido y maravilloso Valparaíso. |